Entradas

Mostrando las entradas de diciembre, 2015

De cambio a transformación, enfrentando la resistencia

Imagen
Por definición, al entrar en un camino distinto de la mayoría de personas, la palabra cambio se convierte en lugar común, no es tan novedoso y así que pocos piensan sobre eso. En realidad se espera que haya cambios en la vida de alguien que pasa a hacer ejercicios diarios por estar en un camino de salud, trabajar y estudiar en un total de 15 horas diarias por estar en un camino de progreso financiero o meditar temprano en la mañana por estar en un camino espiritual. El reto por lo tanto no es el cambio per se y la resistencia de otros: se espera y más o menos hay formas de la sociedad y comunidad reaccionar, de forma positiva o negativa, con páginas dedicadas en internet al tema y libros que abordan riegos y beneficios. Hay metodologías y profesiones que pueden ayudar con este tema. ¿Cuáles son los grandes retos relacionados a los cambios experimentados y su resistencia? Enfoco el tema con base en los cambios realizados en el camino espiritual. El cambio permanente

Cuento de Navidad – La última navidad

Imagen
Jorge y Susanita habían decidido mucho tiempo antes… Primero fue Jorge quien salió de su trabajo. Por el tiempo que ahí estuvo logró un buen dinero, fruto de las leyes de su país. Después, vendió su casa y el vehículo que con tanto esfuerzo había comprado un año antes. Por último, negoció su sociedad en un club importante, cerca de la capital de ese país – para su sorpresa, se ganó más dinero con el título del club que con el carro… Susanita, al saber del empeño de Jorge, hizo lo mismo por su lado, solo que al revés: primero vendió su pequeño coche, después negoció dos terrenos que tenía y por fin, dejó su trabajo, terminando el contrato de arrendamiento y, de repente, se dio cuenta que los largos y raros planes que había hecho con Jorge se estaban concretando. Se encontraron en Europa… por fin se conocían, después de años de verse por Skype y hablarse por WhatsApp. ¿Años? En realidad, no… Fue en enero que Jorge y Susanita se conocieron en un foro y desde ese momento, se s

El regalo que no darás…

Imagen
A esta altura del año y el día en que vamos, imagino que ya tienes una lista de regalos. ¿Correcto? Ya pensaste claramente a quien vas a entregar qué regalo, miraste tu cuenta de ahorros y tu cupo de endeudamiento para cubrir los regalos más caros, y es muy probable que algunos paquetes ya estén escondidos en tu armario. No dudaría que, en tiempos tan prácticos como los de hoy, ya hayas entregado algunos obsequios, tal vez a tu jefe y compañeros de trabajo. Pero, hay algunos regalos que no compraste, no hiciste y probablemente no pensaste. Aquí hago una pequeña lista para que tengas en cuenta: A las personas que partieron de tu vida y de este mundo. Aunque no estén contigo físicamente, puedes darles dos regalos: el primer es el regalo de su memoria, no tanto en términos de recordarlos, sino de practicar lo que te enseñaron y entregaron. El segundo regalo es el del agradecimiento, que tocará sus corazones, no importa donde estén. A los que partieron de tu vida, pero sigue

Navidad, navidad... oops, ¡todavía no!

Imagen
Al entrar diciembre, parece que una alarma suena en el interior del ser e indica que algo muy especial pasa en este mes. La energía cambia, la forma de trabajar es diferente e incluso cómo nos relacionamo s se hace distinto. ¿Por qué? Navidad en realidad es una excusa para un cambio de comportamiento colectivo donde las virtudes y valores se hacen más evidentes que en el resto del año. La estructura social se adaptó a eso, promoviendo vacaciones y estimulando la economía en muchos aspectos. Pero más allá de la idea, símbolo o existencia de esa celebración, es bueno comprender que estos valores y virtudes que aparecen, estas sensaciones que experimentamos y ese deseo de rehacer amistades destruidas, todo eso YA ESTÁ en nosotros, aún antes de diciembre llegar. A cualquier momento del año podemos entonces experimentar la Navidad. Es solo una cuestión de cambiar la consciencia y ver el mundo no como una amenaza constante, sino como un océano de oportunidades que solo es